En Qatar, zona de desierto y abundante petróleo, David Ferrer se ha proclamado jeque del tenis en 2015. El jugador de Jávea logró una valiosa victoria ante Tomas Berdych (6-4, 7-5) forjada desde su mente, con una fortaleza muy superior a la del checo en el partido de hoy.
La reciente victoria de Berdych ante Ferrer en una exhibición en Tailandia y su forma autoritaria de alcanzar la final en Doha otorgaban cierto favoritismo al jugador de Daniel Vallverdú. Sin embargo, cualquier análisis basado en hechos recientes se desmoronó cuando ambos empezaron a hablar con la raqueta.
La movilidad lateral y la constancia de Ferrer contrarrestaban la mayor potencia de Berdych. Además, el checo mostró escaso acierto con el primer saque durante los primeros juegos, mientras acumulaba demasiados errores no forzados desde el fondo. El Berdych más dubitativo sucumbía ante el Ferrer más rocoso.
Frente a un público tan pendiente del partido como de la presencia deDavid Beckham en el palco, el checo adelantó su posición en la pista, redujo sus errores y tomó la iniciativa. Berdych estuvo a un punto de neutralizar dos ‘breaks’ de desventaja en el primer set. Sin embargo, la competitividad y capacidad de sufrimiento permitieron a Ferrer sofocar la reacción de su rival.
El desenlace del primer parcial marcó el estado anímico a ambos lados de la red y la dinámica de la final. Ferrer salía reforzado, y su capacidad de resolver puntos favorablemente en situaciones defensivas desesperaba a Berdych. El jugador checo gozó de tres puntos de set para igualar la final, pero volvió a dudar y sus errores alimentaron de nuevo las opciones de Ferrer.
Una doble falta de Berdych simbolizaba su desesperación y su inferioridad mental ante Ferrer en el duelo que decidía el campeón en Doha. Tras un 2014 con un solo título (Buenos Aires), Ferrer comienza su etapa junto a Francisco Fogués con un premio que deja huella en su palmarés. El tenista alicantino sucede a Rafael Nadal en Doha y ya suma 22 títulos ATP.
Con una continuidad en su juego superior a la mostrada en 2014, David refuerza su estado anímico a una semana del Open de Australia. Allí se presentará como jeque del tenis y con la advertencia de que el mejor Ferrer aún puede volver.ra mejorar su experiencia de usuario. Al continuar con la navegación entendemos que acepta su uso.